Imaginaros que vais a un concierto y el cantante, en un momento dado, se queda solo en el escenario, con la única compañía de su guitarra. Se aparte del micro, da varios pasos adelante, se acerca todo lo que puede al público y canta "a pelo", sin micro. Sólo con la amplificación del aire.
Pues eso lo hace Marcos, el cantante de La sonrisa de Julia, en conciertos "especiales".
Como es algo que a mí me emociona mucho, aquí os dejo un vídeo que he conseguido (por fín!) de uno de estos momentos:
1 comentario:
Uuh.. la Sonrisa de Julia. Recuerdo cuando vi a Xoel (Deluxe) tocar en el Círculo de Bellas Artes y al final se arrancó a capella como si fuera una mezzosoprano. También se arrastró por el suelo... Magnífico
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