4/24/2009

RECUPERANDO A SABINES

Debido a la mexicanización que estoy sufriendo, por obra y gracia de mi compañera mexicana (voy a terminar hablando como Bunbury, ya verás) recordé estos días a ese poeta mexicano que es una maravilla y que hacía tiempo que no leía.
Por supuesto, estoy hablando de Jaime Sabines. Fué un placer reencontrarle, como un viejo amigo con el que no quisiste que naciera la distancia.

¿Te parece bien que te quiera nada más una semana?
No es mucho, ni es poco, es bastante. En una
semana se pueden reunir todas las palabras de amor
que se han pronunciado sobre la tierra y se les
puede prender fuego. Te voy a calentar con esa
hoguera del amor quemado. Y también el silencio.
Porque las mejores palabras del amor están están entre dos
gentes que no se dicen nada.

Hay que quemar también ese otro lenguaje lateral y
subversivo del que ama. (Tú sabes cómo te digo que
te quiero cuando digo: "qué calor hace", "dame
agua", "¿sabes manejar?,"se hizo de noche"... Entre
las gentes, a un lado de tus gentes y las mías, te he
dicho "ya es tarde", y tú sabías que decía "te
quiero".)

Una semana más para reunir todo el amor del
tiempo. Para dártelo. Para que hagas con él lo que tú
quieras: guardarlo, acariciarlo, tirarlo a la basura. No
sirve, es cierto. Sólo quiero una semana para
entender las cosas. Porque esto es muy parecido a
estar saliendo de un manicomio para entrar a un
panteón.

1 comentario:

Mar * dijo...

"sufriendo"?