6/29/2011

Luna


Tú, que llenaste de luz todo esta noche infinita. 
Mientras yo perseguía estrellas fugaces 
sin llegar nunca a buen puerto.
Malherido buscando un refugio
sin paraguas en medio de la tormenta.
Esperaba una primavera que nunca llegaba
mientras la vida pasaba de largo.
Saliendo solo en todas las fotografías.
Hasta que tú apareciste.
Para llevarme a tu isla.
Allí donde todas las heridas se pueden curar.
Ser la Ariadna que andaba buscando
y darme el hilo que necesitaba
para salir del laberinto
Aprendiendo las coordenadas para un sueño
del que nunca tuviera que despertar.
Anclado en el puerto de tu risa
sin tener que volver nunca al mar.
Me abriste una puerta
y yo tiré todas las demás.
Ahora todos los finales son felices
y todas las cartas son cartas de amor.

Lanzarote, junio 2011.

No hay comentarios: