Hay un poeta que me gusta mucho. Me encanta su forma de encontrar poesía en lo cotidiano.
Se llama Luis Alberto de Cuenca, y creo que no es lo suficientemente valorado.
Este poema es mi preferido:
EL DESAYUNO
Me gustas cuando dices tonterías
cuando metes la pata, cuando mientes,
cuando te vas de compras con tu madre
y llego tarde al cine por tu culpa.
Me gustas más cuando es mi cumpleaños
y me cubres de besos y de tartas,
o cuando eres feliz y se te nota,
o cuando eres genial con una frase
que lo resume todo, o cuando ríes
(tu risa es una ducha en el infierno),
o cuando me perdonas un olvido.
Pero aún me gustas más, tanto que casi
no puedo resistir lo que me gustas,
cuando, llena de vida, te despiertas
y lo primero que haces es decirme:
"tengo un hambre feroz esta mañana.
Voy a empezar contigo el desayuno."
Si queréis leer más cosas suyas, podéis hacerlo AQUÍ
2 comentarios:
Qué cotidianamente preciosa!!! Soy una defensora a muerte de los pequeños detalles, que le dan sentido a la vida. CLARO QUE SÍ!!
lo apunto, ya había oído hablar de él pero no le presté mucha atención... conseguiré algo
saludos y salud
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